El 17 de octubre a las 22.17 el siguiente mail llegó a cinco casillas de correo: “BOMBA EM EMBAJADA JUDIOS PUTOS. VAM0S A MATAR A TODOS L0S JUDI0S PUTOSSSSSSSSSSSS YYY A LOS GRINGOS…VAM0S A DEJAR BOMBAAS EM EMBAJADA ESTAD0S UNIDOS Y ISRAEL EM ARGENTIN4- BUENOS AIRES 21 – Ezzedeen AL-Qassam Brigades”. El mail, de marcado tono antisemita, llegó a casillas de correo de dos embajadas: la de Estados Unidos y la de Israel en Argentina.
En medio de la situación de conflicto que se vive en Israel y Gaza, se tomó como una amenaza seria y se hizo la denuncia judicial. El hecho solo trascendió a la mañana siguiente. El caso le tocó al juzgado federal 9 -a cargo de María Eugenia Capuchetti– porque estaba de turno con las fuerzas de seguridad.
Pero, finalmente, quedó acumulado con otro caso que se había abierto en agosto pasado por varias amenazas enviadas a diversas embajadas. Ese caso estaba radicado en el juzgado federal 12 que está a cargo de Ariel Lijo. El juez- tal como reveló Infobae el miércoles- ordenó la detención de un joven de 18 años que vive en Don Torcuato.
El nombre y apellido del joven coincide con el usado en los mails que se enviaron en agosto y septiembre pasado a las embajadas de Estados Unidos, Irán, Canadá, Emiratos Árabes Unidos y la Unión Europea. Y también con la dirección utilizada para enviar la última amenaza contra Estados Unidos e Israel.
Aquella investigación había llevado a una dirección de IP -relacionada con los mails- que se localizaba en la casa que fue allanada por orden de Lijo por efectivos del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) de la Policía Federal. En la investigación además de los federales intervinieron los integrantes de la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI) que encabeza Horacio Azzolin.
El joven fue detenido el miércoles e indagado -acusado de amenazas- por Lijo. Asistido por el defensor oficial Juan Hermida, negó haber sido el autor de los mails amenazantes y afirmó que hace unos meses le hackearon el Facebook. Alguien creó una cuenta similar a la suya con su foto. Fue entonces que en su cuenta original comunicó: “Me hackearon”. No descarta que del mismo modo que le crearon una cuenta “melliza” de Facebook le hayan creado cuentas de mails similares a la suya en la que incluyeron su nombre y apellido. También dijo que cree que algún vecino lo puso en esta situación “porque somos de compartir el wifi”.
El joven trabaja en un taller mecánico de San Isidro, estudia en una escuela técnica de su barrio y vive en junto a sus padres y una hermana. En la causa también declaró su padre, pero como testigo. Y contó el episodio de la cuenta melliza de Facebook y también otro muy raro sobre el posible uso de la red de wifi de su casa por parte de gente del barrio donde viven. Explicó también que tuvieron el wifi sin contraseña y que sospechan que unos vecinos-a los que describió como conflictivos- se lo usaban. Fue por ello que pidieron que la empresa proveedora le pusiera clave para evitar que accedieran a la conexión de wifi.
Mientras se realiza el peritaje de los dispositivos secuestrados en el allanamiento, el joven (cuya identidad Infobae no revela) seguirá detenido. Los investigadores no descartan la hipótesis de que al utilizar la red de wifi de la familia, el IP del que creó las cuentas de Gmail desde las que se hicieron las amenazas haya quedado relacionado con el joven detenido. Pero tampoco creen la versión que dio el indagado: su participación en las amenazas se descartará cuando se pueda acceder a los equipos para analizar.
