El acuerdo alcanzado entre el Gobierno y los residentes médicos, tras el lamentable episodio de violencia policial sufrida por los profesionales, logró desactivar el conflicto en el sector, pero deja planteadas más dudas que certezas de cara al futuro.
Sin embargo, en una movilización realizada ayer en el predio del hospital Pediátrico Avelino Castelán, los residentes señalaron que “el objetivo central de los reclamos es lograr que la totalidad del aumento otorgado vaya al básico”, aspecto que fue rechazado por la patronal.
Indicaron además que “el colectivo está muy enojado y muy decepcionado con la ministra de Seguridad, Gloria Zalazar”. Al respecto recordaron que ‘en muchos medios salió a decir que nadie sabe quién ordenó actuar a la policía, pero ella misma nos dijo que activó el protocolo llamando a la jueza que autorizó la acción de la fuerza”, aseguraron los residentes durante su segunda manifestación.
