El gobierno israelí aprobó líneas generales de la primera etapa para alcanzar este objetivo, según las cuales al menos 50 secuestrados, mujeres y niños, serán liberados durante cuatro días, durante los cuales habrá una pausa en los combates. La liberación de cada diez secuestrados adicionales resultará en un día adicional de respiro.
El gobierno israelí, las FDI y las fuerzas de seguridad continuarán la guerra para devolver a todos los secuestrados, completar la eliminación de Hamás y garantizar que Gaza no renueve ninguna amenaza al Estado de Israel.
Hay que remarcar que Israel libera a 150 terroristas detenidos a cambio de los 50 secuestrados.
Este primer número de rehenes por liberar serán menores de edad y mujeres. Serán las primeras treguas temporales que tendrán lugar en la guerra entre Israel y Hamás, que se acerca a cumplir ya casi 50 días.
Cada día se liberarán entre 12 y 13 rehenes. Por cada 10 rehenes israelíes adicionales que sean liberados, se concederá otro día de pausa en los combates.
Los funcionarios israelíes creen que además de los 50 rehenes, Hamás puede liberar a otros 30 israelíes.
El gobierno de Israel estableció ciertas condiciones para el acuerdo, como un compromiso de Hamás por identificar a los rehenes que otros grupos terroristas tengan y que no se libere de prisión a nadie convicto por asesinato. Hamás alega tener a unos 210 de los 240 rehenes mientras que se cree que el resto está en manos de la Yihad Islámica Palestina.
El acuerdo también incluirá que la Cruz Roja pueda visitar a los rehenes de Hamás en Gaza a fin de brindarles la asistencia médica que necesiten.
El primer paso de la aplicación del acuerdo implicará, según el Canal 12, que Hamás entregue a los rehenes a la Cruz Roja, tras lo cual serán transferidos al ejército israelí. Luego, los rehenes se someterán a un control médico inicial por parte de las autoridades y luego serán llevados a uno de los cinco centros médicos aislados en todo Israel para reunirse con sus familias. En la cuarta etapa, las autoridades médicas y de defensa determinarán juntas si al menos algunos de los rehenes pueden ser interrogados.
En la etapa final, los rehenes se someterán a un interrogatorio con agentes de seguridad antes de ser finalmente liberados.